viernes, junio 06, 2008

Dváindvájset

"Nuestra casa de Castilfrío se llama Kokoro, palabra que en japonés significa corazón, pero no alude a la víscera cordial, sino al sentimiento." (Fernando Sánchez Dragó, en Kokoro: A vida o muerte. Dragó entrevista a Dragó.)

Metaforicamente hablando, me cagué como directo resultado de leer la frase anterior. "No cualquier puto", me dije, "se avienta una frase así nomás, al chile pelón". La reflexión que a continuación me entretuvo, menos cargada de vulgaridades, he de confesarlo, y por ello necesariamente menos
digna de ser citada textualmente, me condujo en primer lugar a desempolvar este lugarcillo que había sido dejado de mi mano tiempo ha, y en segundo, y quizás más importante, a volver a escribir.

Un saludo para Octavius, el chico homeless que ai medio le echa ganas a la escribida. Ya voy a leer tus entradas completas y a poner comentarios y toda la cosa. Nomás no te pongas muy emo. Ya merito saludaba al wey de Tony pero ya ni postea, el bato. Se me hace que se fue a vivir a Puñalcingo.

6 comentarios:

Antonio Cárdenas dijo...

Ahí!.... es donde te equivocas:
http://antoniocardenaslopez.blogspot.com

(De nuevo notificando mi cambio de domicilio)
(...Permiso)

Anónimo dijo...

Blogs para nadie...
Blogs para todos...
Blogs para algunos, camisetas con fiestas comunistas para otros...


Ya me agrado la chingadera esa de leer entradas, me dedicaré más seguido a leerlas y postiiiiar.


Saludeishons señores,

Octavio Aguirre dijo...

Pero denle duro, neta que se pone re chido esto de picarle al teclado.

Antonio Cárdenas dijo...

y por fa comentenle a octavio y a mi hijos de su puta, no anden nomás aquí de lame huevos por la sensación de los títulos poliglotas y el papel tapiz.

Quinientos_uno dijo...

¿Qué dice este negro?

Antonio Cárdenas dijo...

que cierres esa bocota!